jueves, 28 de enero de 2010

Riesgos para la salud (I)

Acido fluorhídrico. El contacto del ácido hidrofluórico anhidro con la piel produce graves quemaduras que se sienten inmediatamente. Las soluciones acuosas concentradas de este ácido también causan una rápida sensación de dolor, pero las soluciones diluidas no siempre producen efectos visibles inmediatos. El contacto externo con el líquido o los vapores provoca una intensa irritación de los ojos y los párpados que puede ocasionar defectos visuales prolongados o permanentes o la destrucción total de los ojos. Se han dado casos de fallecimiento por exposición cutánea en tan sólo un 2,5 % de la superficie corporal total. En caso de contacto con ácido fluorhídrico, es esencial administrar rápidamente un tratamiento, que consistirá en lavar la zona afectada con agua abundante de camino al hospital y, cuando sea posible, sumergirla en una solución helada de sulfato magnésico al 25 %. El tratamiento normal de las quemaduras leves o moderadas consiste en la aplicación de un gel de gluconato cálcico. Las quemaduras más graves pueden precisar la inyección de una solución de sulfato magnésico o gluconato cálcico al 10 % en y alrededor de la zona afectada. A veces es necesaria la anestesia local para calmar el dolor.
La inhalación de nieblas concentradas de ácido fluorhídrico concentrado o fluoruro de hidrógeno anhidro provocan irritación respiratoria y una exposición de tan sólo 5 minutos suele ser fatal en el plazo de 2 a 10 horas por la aparición de edema pulmonar hemorrágico. Las exposiciones cutáneas también pueden ir acompañadas de inhalación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario